Este es un rompecabezas de finales del siglo XIX que se hizo tan popular que todavía hoy se comercializa en diferentes versiones y materiales. Pertenece a la misma categoría de juegos que el cubo de Rubik, aunque resulta mucho más sencillo de abordar.

Se trata de ordenar las piezas 1, 2, 3, ..., 15 en este orden. El hueco deberá quedar después de la pieza 15. Si revolvemos las piezas al azar, solamente la mitad de las disposiciones tendrán solución, mientras que la otra mitad dejarán siempre al menos dos piezas descolocadas.

Elige la versión Posible si quieres resolverlo y la versión Imposible si quieres comprobar alguna de esa mitad de disposiciones que no pueden reordenarse completamente. Después, haz clic en el botón .

Haz clic sobre cada pieza para desplazarla al hueco vecino. En la parte superior del tablero puedes ver el número de movimientos que realizas y una fracción de lo que falta por ordenar.

También puedes ver el tiempo empleado. Puedes detener el cronómetro haciendo clic en , pero dejarás de ver las piezas hasta que lo pongas en marcha otra vez con .

Para comenzar un nuevo juego, haz clic en .